Para Rosemary Téllez, llegar a UPAZ y el camino hacia donde esto la ha llevado, ha sido un desenlace bastante inesperado para su historia. Actualmente se encuentra terminando su pasantía en el United Nations System Staff College (UNSSC) en Bonn, desde dónde nos comparte cómo inició este recorrido.
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Estudió contaduría pública y finanzas en la Universidad Nacional Autónoma de León en Nicaragua, misma ciudad en la que nació y creció. Poco después, comenzó a trabajar en la Universidad Tecnológica La Salle en el área de proyectos con Cooperación Internacional.
Dichos proyectos se hacían en colaboración con la Cooperación Alemana, y estaban enfocados en la integración de energías renovables principalmente en el sector productivo, y en la transición de una matriz de energía basada en combustibles fósiles hacia una más limpia.
Aunque estaba a cargo de la parte financiera de los proyectos, el interés de Rosemary por el componente social la motivó a participar en las visitas de campo a las distintas comunidades urbanas y rurales. El contacto con estas comunidades y con los cooperantes le permitió un entendimiento más exhaustivo acerca de este tipo de proyectos. Comenzó a plantearse cómo podía integrar su experiencia sobre economía y sistemas financieros con los temas de interés de los proyectos.
Después de dos años en ese departamento, Rosemary pasó a formar parte del equipo de comunicación de la universidad. Estando ahí supo de la oportunidad de becas del DAAD para estudiar en UPAZ. Consideró era el momento idóneo para dar un giro a su carrera y decidió aplicar. Aunque su opción inicial era la maestría en género, terminó por elegir el programa en Resolución de Conflictos, Paz y Desarrollo, pues a su parecer brinda un espectro más amplio desde tres dimensiones: derecho internacional, estudios de paz y conflictos, y en el que tenía mayor interés, desarrollo sostenible.
Los primeros meses en UPAZ le permitieron empaparse de temas que hasta ese momento no conocía, estaba fascinada por este nuevo mundo, quería llevar todas las clases y especializaciones, hacer tres maestrías al mismo tiempo, saberlo todo.
Sin embargo, iniciando el segundo semestre, supo que era sobre la línea de desarrollo sostenible y medio ambiente por donde quería continuar. Solicitó llevar algunos cursos adicionales del programa RMSED, experiencia clave para tener mayor perspectiva sobre estos temas y al mismo tiempo adquirir las bases para poder realizar su pasantía en Bonn.
Resalta como la dinámica de UPAZ y el mismo campus, permiten establecer relaciones muy fraternas con profesores, a quiénes agradece su gran disposición y recuerda como mentores tanto en el ámbito profesional como personal. Es justo a través de conversaciones con el profesor Fernando Blasco, que Rosemary da con su pasantía en Bonn.
Esta pasantía ha sido una experiencia desafiante y de gran aprendizaje. La institución está encargada de la capacitación y entrenamiento de todo el personal dentro del sistema de Naciones Unidas. La sede de Bonn, donde se encuentra Rosemary, está enfocada específicamente en la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La primera parte de su pasantía, colaboró con la organización del octavo Summer Academy, el evento más importante de esta sede, abierto al público y que reúne a personas de los diferentes sectores para trabajar bajo un enfoque específico. Este año el objetivo era medir el progreso que se ha logrado hasta ahora con respecto a la agenda 2030 y cómo acelerar su implementación.
Como parte del evento, se llevan a cabo los talleres “App Labs” en temas relacionados al desarrollo sostenible. Rosemary tuvo un rol importante en la organización de los mismos, coordinando temas de logística, contenido, inscripción, etc., pero además estuvo encargada de diseñar y liderar uno de ellos titulado “Diseñando para la Circularidad,” que está basado en su tema de tesis. Su investigación trata sobre el aporte que la economía circular puede tener en el cumplimiento de la agenda 2030.
Diseñó su taller basado en su experiencia como estudiante en UPAZ, utilizando métodos de aprendizaje más dinámicos y alejados de las estructuras tradicionales. El taller tuvo tanto éxito que el UNSSC le solicitó diseñar un curso sobre este tema para la plataforma en línea, validando así la relevancia que tiene su tema de investigación, y poniendo en evidencia la necesidad y el potencial que hay por desarrollar cursos al respecto.
Como se mencionó antes, su relación con la cooperación alemana viene desde hace ya varios años. Hoy como becaria del DAAD, considera muy acertada la alianza con UPAZ, pues el perfil de las maestrías que ofrece la universidad se ajustan a los temas que tanto el DAAD como Alemania han venido fomentando en Centroamérica en los últimos años. “Es de las mejores becas porque te promueve como estudiante, pero no te ata, la beca fomenta la investigación y no limita el campo de estudio.” Además, da la oportunidad para realizar una estancia de 2 a 6 meses en Alemania, lo que le permite a ella hoy, estar en Bonn.
Elegir este camino ha traído el cambio que Rosemary tanto buscaba. Su entusiasmo por continuar aprendiendo fija una nueva maestría en el horizonte, esta vez enfocada en economía circular, con la ambición de volver a Latinoamérica en el futuro cercano para implementar todo lo aprendido.
“Mi experiencia en UPAZ me devolvió el entusiasmo por aprender, por conocer personas y diferentes contextos, y fortaleció mis ganas por trabajar el desarrollo sostenible principalmente de Latinoamérica y el Caribe… UPAZ me enseñó que hay que actuar”.